martes, 17 de marzo de 2015

Tema 10. La financiación de la empresa


La financiación de la empresa:

En un principio, cabría pensarse que la financiación de la empresa se basa en la obtención de recursos para poder realizar las inversiones que así consideren oportunos los mandatarios de la empresa. Sin embargo, va mucho más allá de esto, y tiene las siguientes funciones a su cargo:

  • Planificación financiera: que tenga en cuenta inversiones futuras.
  • Decisiones de inversión: analizar donde invertir.
  • Obtención de recursos financieros: cómo obtenerlo
  • Control del equilibrio financiero de la empresa: controlar el nivel de endeudamiento y si tenemos capacidad de pago ante esas obligaciones.
Además de estos puntos, debemos tener en cuenta dos aspectos:

  • Análisis y selección de inversiones (activo) de la empresa.
  • Análisis de distintas posibilidades de obtener recursos (pasivo)

Veamos primero, las distintas posibilidades de financiación. Para ello, estudiaremos la siguiente Clasificación de las fuentes financieras:
1. Según la propiedad de los recursos: financiación propia (capital y beneficios no distribuidos o
reservas, el patrimonio neto) y ajena (aportados por terceros que generan una deuda u obligación para la empresa, son el exigible a corto y a largo plazo).
2. Según el tiempo que permanecen los recursos: recursos o capitales permanentes (a largo plazo,más de un año, tenemos el pasivo no corriente) y recursos a corto plazo (menos de un año, pasivo corriente)
3. Según su procedencia: financiación interna (generada por el propio funcionamiento de la empresa:
reservas y amortizaciones) y externa (provenientes del exterior de la empresa: capital y deudas a corto y largo plazo).
A la hora de escoger que tipo de financiación vamos a tener, debemos tener en cuenta la estructura financiera de la empresa, que es la combinación de los recursos financieros que utiliza y que se
pueden observar en el pasivo del balance de situación.

Veamos entonces, algunos de los tipos de financiación antes nombrados:

  • Financiación Interna: Recursos que proceden de la actividad normal de la empresa, de los beneficios que general la sociedad. Una empresa que tiene beneficios tiene dos opciones: Retenerlos, se pasan a Reservas y es la principal fuente de autofinanciación, aumenta el valor de las acciones y, por tanto, de la empresa y posibilitan el crecimiento. Aumentando el valor empresa) o Repartirlos, donde se denominan dividendos y dan satisfacción a los accionistas. En general, sea uno u otro, la financiación interna tiene una serie de ventajas: autonomía e independencia financiera y mejora su solvencia al aumentar los fondos propios. Es la principal fuente para las PYMES. Como Inconvenientes: al no ser remunerados (aunque tienen coste de oportunidad) pueden usarse para inversiones poco rentables. Otro es el conflicto entre accionistas y directivos (dividendos y reservas)
  • Financiación Ajena a corto plazo: Si los recursos propios (capital, reservas y beneficios) son insuficientes, la empresa puede acudir a terceros para obtener fondos (recursos ajenos). Hay que tener en cuenta que pedir prestado tiene un coste: los intereses. Podemos escoger entre: Crédito comercial de proveedores: al no pagar al contado se obtiene una facilidad para financiar las compras. Se suele formalizar en una letra, efecto o recibo bancario aplazado (30, 60 o 90 días) y se basa en la confianza mutua. Pueden tener un coste: renuncia a descuentos por pronto pago. Muy habituales. Préstamos y Créditos bancarios: obtención de recursos de instituciones financieras. Coste: intereses. Requiere negociación con Banco o Caja pudiendo exigir garantías personales (aval) o reales (hipoteca). El préstamo consiste en recibir una cantidad debiendo devolver en el plazo fijado más los intereses. En el crédito el banco pone a disposición de la empresa una cantidad, pudiendo usarla toda o sólo parte, pagando intereses sólo por la parte dispuesta (útil cuando no es seguro que vaya a necesitar todo el dinero, tiene menor coste). Descuento comercial o de efectos: los derechos de cobro formalizados en letras o pagarés (efectos comerciales a cobrar) pueden convertirse en dinero antes de la fecha acordada para el cobro (vencimiento). El banco adelanta el dinero (menos una comisión e intereses) y es el banco quien se encarga de cobrar al cliente. Ventajas: disminuye el periodo medio de maduración y aporta liquidez. Inconveniente: el deudor puede no pagar al banco e incrementar los gastos. Factoring: La empresa traspasa a una sociedad de factoring (banco generalmente) todos sus derechos de cobro sobre clientes. El banco les adelanta el dinero menos una importante comisión e intereses. La empresa se deshace del riesgo de impago pues el banco se encarga de cobrar a sus clientes. Tiene un coste muy alto.
  • Financiación Ajena a largo plazo: se relaciona con los elementos de inversión (activo fijo) que son también a l/p. Podemos decidirnos entre: Emisión de obligaciones o bonos (empréstitos): Una empresa puede conseguir dinero dividiendo el importe que necesita en pequeñas cantidades iguales y emitiendo títulos llamados obligaciones por ese valor. Estos títulos se ofrecen al público (a través de la bolsa o bancos) y los inversores que los compran ingresan dinero en la empresa convirtiéndose en sus prestamistas o acreedores. Los acreedores adquieren el derecho a cobrar un interés periódico y a que se les devuelva la cantidad entregada en los plazos pactados. Créditos para adquisición de inmovilizado: más habituales, son préstamos a l/p para financiar sus inversiones en inmovilizado, generalmente concedidos por los bancos y cajas, aunque también por sus proveedores de bienes de equipo (en este caso se formalizan en letras de cambio para darles más seguridad). Leasing o arrendamiento financiero: Contrato de alquiler donde el arrendador alquila un bien de inversión (elemento de activo fijo) a una empresa o arrendatario comprometiéndose este a pagar unas cuotas de alquiler, siendo normal que al final del contrato haya una opción de compra que permite al arrendador quedarse con el bien en propiedad. Hay dos formas: leasing financiero (el arrendador no es el fabricante del bien adquirido por leasing, sino una entidad financiera que lo compra al fabricante y lo pone a disposición del arrendatario, el contrato no se puede rescindir y suele incluir opción de compra al final del contrato) y el leasing operativo o renting (el arrendador es el fabricante y pone el bien a disposición del arrendatario encargandose el arrendador de todo el mantenimiento y renovación, es rescindible el contrato y es mucho más caro, no suele haber opción de compra).

A la hora de buscar financiación la empresa, deberá buscar en el denominado Entorno Financiero de la empresa: Está formado por el conjunto de intermediarios y mercados a los que acude la empresa para financiar sus inversiones y en el que influyen los tipos de interés. En este entorno hay dos aspectos clave: los activos financieros que se generan y los mercados en los que se intercambian.
Los activos financieros son títulos-valor que constituyen el reconocimiento de una deuda por quien los emite y que dan a su poseedor el derecho a cobrarlos. Los crean los agentes con necesidad de financiación. Características: Rentabilidad: si el rendimiento es conocido a priori son de renta fija (bonos y obligaciones). Si el rendimiento depende de la marcha de la empresa son de renta variable (acciones). Riesgo: depende del plazo de devolución y de las garantías del emisor para hacer frente a la deuda a su vencimiento. Liquidez: facilidad para convertir el activo en dinero sin costes significativos. En general, un activo es más rentable cuando mayor es su riesgo y menos es su rentabilidad (prima de riesgo).

Otra forma de financiarse las grandes empresas es a través de el mercado de valores y la bolsa
El mercado de valores es un mercado especializado en la compraventa de toda clase de títulos (acciones, bonos, etc.) que tiene como función canalizar el ahorro hacia la inversión. Existe una oferta (empresas y organismos públicos) y una demanda (ahorradores). Distinguimos un mercado primario o de emisión (venta por primera vez) y secundarios o de negociación (se intercambian los activos ya existentes). Ambos mercados están estrechamente relacionados pues el segundo da liquidez al primero. El mercado secundario más importante es la Bolsa donde las cotizaciones de los activos dependen directamente de la confianza y las expectativas, e inversamente de los tipos de interés.